Lo que esconde tu nombre

Y tal vez los ángeles no existían, no existía el bien absoluto, pero podía asegurar que sí existía el mal absoluto

Esa frase y esta otra: El mal no sabe que es el mal hasta que alguien no le arranca la máscara del bien, me han marcado. Ambas son del libro que vengo a comentaros hoy y que, para mi sorpresa, se convierte de mis favoritos. La sorpresa es porque es un libro de una autora española, Clara Sánchez. A pesar de que no tengo nada en contra de nuestra literatura, bien es cierto que no me suelen gustar los libros que he leído; pero este ha sido totalmente al contrario. Este en concreto ha recibido el Premio Nadal 2010, bastante merecido según mi opinión.

Sandra se ha retirado a un pueblo de la costa levantina: tiene treinta años, ha dejado el trabajo y, embarazada de un hombre del que no está enamorada, pasa los días intentando aplazar la decisión de qué hacer con su vida.
En la playa conoce a un matrimonio de octogenarios noruegos que la ayudan y la tratan como los abuelos que no ha tenido. Karin y Fredik parecen la solución a los problemas de Sandra e incluso le ofrecen un sueldo por acompañar a Karin a rehabilitación, los paseos o las compras.
Nadie diría que esas tres vidas unidas al azar constituyen la razón de ser de Julián, un anciano que sigue las idas y venidas de los noruegos. Un día Julián aborda a Sandra y le revela detalles del pasado absolutamente insospechados. Aunque Sandra no le da mucho crédito, poco a poco empezará a mirar de una forma nueva las costumbres, los amigos, las palabras y los silencios de la pareja de ancianos, sin darse cuenta de que está poniendo su vida en peligro.
Un subyugante relato de terror sin efectos sobrenaturales, y ante todo, una absorbente novela sobre la memoria y la redención de la culpa.

Este ha sido el libro que me he ido leyendo entre las horas muertas en los autobuses de camino a la universidad 443 páginas en una semana... no esta mal xD Este libro trata básicamente de los nazis, aunque algunos ya lo habréis sospechado a pesar de que no se mencione en la contraportada.

No os esperéis una novela con mucha acción, es más... psicológica. Se divide en dos partes, se alternan capítulos en los que la protagonista es Sandra con los de Julián; ambos en primera persona, lo que le da un toque muy personal que hace que te introduzcas de lleno en la historia. Nos relata la pacífica vida de estos "entrañables" ancianitos desde le punto de vista de la perspicaz Sandra, además de los quehaceres del anciano Julián, que aprovechará sus últimos días de vida para ir a por aquellos que marcaron su vida para siempre.

Porque esa es otra, Julián, de vez en cuando recordará su estancia en los campos de concentración y relatará sucesos horribles... que te pondrán la piel de punta y lágrimas en los ojos si eres sensiblón/sensiblona.

La narración es muy sencilla, además de que esa forma de contar una historia (intercalando la 1ª persona entre los protagonistas) siempre me ha gustado porque te hace verlo todo desde otro punto de vista, dejándote con ganas de más.

Os repito de nuevo que no esperéis un libro con mucha acción; precisamente en esa parsimonia, en esa apacible tranquilidad es donde radica el miedo y el horror por el pasado de Karin y Fredik. También puedes llegar a sentir ganas de matar a todos esos... nazis. Con esto y puntuando el libro con un 9/10 termino la reseña :)


La canción es del grupo Green Day - Know your enemy. n_n