Papa to musume no nanokakan

El mayor de nuestros enemigos suele ser nuestro propio carácter

Por fin lo terminé, que pesadez de dorama ¡y tan solo con 7 capítulos! A pesar de que la trama es algo que no había visto nunca y parecía interesante se me hacía interminable... -.- Va a ser cierto eso de que los doramas japoneses son peores que los coreanos xDD

Kyoichiro y su hija adolescente, Koume suben juntos al mismo tren después de haber visitado a la abuela de Koume. Él ve aquello como una oportunidad de conocer mejor a su hija, ya que su relación es algo fría. Por una fuerza misteriosa, ambos terminan con sus mentes en el cuerpo del otro. Desafortunadamente, ellos no tienen otra opción mas que intercambiar vidas, pretendiendo ser lo que antes eran y hacían en la escuela, en el trabajo y en la casa.

Cómo ya he dicho, no me ha gustado en absoluto, la trama era buena, pero ahí se queda. El padre es lo único que se salva, el resto de personajes son planos, no me han transmitido nada; sobretodo la madre, por dios, que parece un florero...

No lo han desarrollado bien, yo le hubiera sacado mas "jugo", se han limitado a contar cuatro cosas que les ocurren a Koume en el trabajo y a Kyoichiro en la escuela. Realmente no era ningún reto, y aunque he de salvar alguna escena, el resto no me ha gustado nada.

Tambien he notado cierta tirantez entre los protagonistas, sobretodo por parte de la actriz que interpreta a Koume... No había nada de química entre ellos, NADA.

Kyoichiro Kawahara lo borda, de verdad. Esos gestos, esos bailecitos, esos suspiros... Parece realmente una adolescente. Pensad en lo difícil que tiene que ser actuar como una jovencita adolescente teniendo un cuerpo y mentalidad de un hombre de 50 años. Todo un logro, y es la única razón por la que he terminado este dorama. ^^

Koume Kawahara, que sosa por dios. Según mi opinión no aparenta ser un hombre maduro, si no una adolescente apática. No se cómo lo hará en otras historias, pero madre mía, que mal lo ha hecho aquí.

Cómo podéis leer, NO recomiendo este dorama. A pesar de que leí muchas críticas muy buenas de esta historia, a mi no me ha enganchado (ya lo habréis podido observar, dado el tiempo que he tardado en verlo...).

Últimamente voy casi obligada a ver doramas japoneses, porque le tengo cariño al idoma y al primero que vi: Hana Yori Dango. Prefiero mil veces más los coreanos, si tenéis alguna recomendación japonesa que sea buena de verdad, hacedmela. A ver si vosotros lográis que recuperere la pasión por los dramas japoneses.
Por ello, he tomado la decisión de sólo ver aquellos dramas de Japón en los que salgan los actores que me gustan.

Después de esta ácida entrada, toca algo de musiquilla, así que os dejo con el piano <3 Esta melodia es de Yiruma, y se titula May Be. Simplemente hermosa.



¡Hasta pronto, bloggeros! :3